En la nave este se muestra la destacada riqueza escultórica que caracteriza al claustro en los sepulcros de los siglos XV y XVI y sobre todo en las tres hermosas portadas policromadas y decoradas con los blasones de Castilla y León en dinteles y jambas, que dan acceso a las capillas y al museo.
Una vez consagrada la Catedral en 1260, comienza una etapa de ampliaciones del templo. La primera y más importante es la construcción del nuevo claustro para sustituir al románico de la catedral anterior. Lo emplazaron junto a la cabecera de la catedral, en el ángulo formado por las capillas de la nave lateral sur y el brazo del crucero..
Por la diferencia de niveles, al hallarse construida la catedral en la falda del cerro del castillo, el claustro tiene dos niveles..
El claustro alto se convierte en un homenaje a los Reyes y Obispos que construyeron la catedral, quedando varios de ellos inmortalizados en magníficas esculturas bajo las ojivas de los muros, brillantemente decoradas con elementos vegetales de racimos y hojas de parra, higuera y roble..Todo este conjunto se completó con imágenes de apóstoles, santos, los bellísimos grupos escultóricos de los cuatro ángulos, el artístico tímpano de la Deésis y las tres portadas de las capillas que se abren al claustro. Es uno de los conjuntos más bellos del gótico radiante español del siglo XIII..
La construcción la inició el maestro Enrique hacia 1265 y dirigió las obras hasta su muerte, acaecida el año 1277. Concluyó la obra el maestro Juan Pérez, que muere el año 1296..
A la salida de la sacristía, a la izquierda, en la nave norte, se halla la escultura del obispo D. Mauricio, fundador de la catedral; fue realizada hacia 1235 y procede del parteluz de la portada del Sarmental, trasladada a este lugar en el año 1960 ante el grave estado de deterioro que presentaba..
En la siguiente se hallan las destacadas esculturas policromadas del Rey San Fernando y su esposa Beatriz, hija del emperador europeo Federico II de Suabia, que evocan su boda, celebrada en la anterior catedral, con el gesto del rey entregando el anillo a la esposa..En el machón o esquinas del claustro se hallan unos grupos escultóricos de gran belleza: Los hijos del rey Alfonso X el Sabio, la Adoración de los Magos, el grupo escultórico que recuerda a los fundadores y constructores de la catedral y la Anuniación..
En el ángulo situado entre las naves norte y oeste se halla emplazada la capilla de San Jerónimo, obra arquitectónica de Juan de Vallejo, del siglo XVI. En ella destaca el retablo tallado en madera de nogal, dorado y policromado, obra atribuida a Diego Guillén, que se inspira en el mayor de la capilla de los Condestables..
A la mitad del recorrido del claustro se halla la representación de Cristo Majestad, acompañado de la Virgen y San Juan, suplicantes, y rodeado de ángeles pasionarios; todo el conjunto es de gran belleza y finura y está policromado.